lunes, 3 de agosto de 2009

Pensé que... pero no.


Hay cosas que nunca voy a llegar a ser, y esa certeza... frente a algunas cosas, me aterra.
¿Por qué para mí es tan importante?
¿Por qué no me tranquilizan sus palabras? porque antes lo hacían
Por más que me esfuerce hay cosas que nunca voy a lograr. Me gusta ser femenina, por ejemplo, pero la mayor parte del tiempo no lo soy... me lleva mucho trabajo serlo y normalmente no tengo ni tiempo ni energía para hacerlo.

Y me duele ser yo, ultimamente. Me duele porque lo decepciono, o me decepciono a mi por lo que yo soy para darle. Las cosas me salen mal.
Intento seguir adelante, pero a veces las lágrimas se me apoderan en frustración... Pero todo sigue igual.

Aunque suene increíble a esta altura ... estoy feliz, mucho más feliz. Pero mucho más preocupada.

Qué cosa compleja los sentimientos ¿no?. Cómo se acumulan y se terminan mezclando. Mataría por un daikiri de durazno en este momento, por un grupo de amigos para reirme, por una noche en vela en un lugar más divertido y vivo que mi habitación vacía.

El desorden se apodera de mí y no lo puedo evitar, tendré que llamarme a silencio, a tranquilidad y paz y ordenarme. Porque sino no puedo avanzar, ¿no es así?

Me preocupa a dónde va el arte, esta semana me dolió en ese lugar que siempre me duele... ese no sé bien dónde, ver cómo muere definitivamente mi concepto sobre una de mis favoritas cantautoras... y me hizo repensar mucho, además de asquearme.

Sobre el amor, sobre el sexo, sobre el cuerpo, la belleza y todo eso. Que en teoría está todo relacionado...
y me gustaría estar en desacuerdo con esa teoría, me gustaría oponerme... pero no
me gustaría ser muchas cosas que no soy
siempre pensé que podía controlar mis emociones... pero no.
siempre quise tener una voluntad de acero... pero no, no la tengo.
creí ser fuerte... pero la brisa me derrumbó, y todavía no me termino de levantar.
pensé que era mujer... pero soy apenas un bosquejo de una.
siempre creí ser especial en algo... pero no hay nada único en mí.
decepcionarse de uno mismo, sobretodo por lo que uno quiere de uno para otro, es terrible.

como siempre, cuando no tengo donde escapar, termino acá... por algo será.